sábado, 21 de septiembre de 2013

des-hecho

ya no me quedan lágrimas
con las que regar
estas flores marchitas

ya no me queda fatiga
con la que labrar
esta tierra baldía


ya no me queda sangre
con la que derramar
por esta herida abierta


ya no me quedan dentaduras
postizas, con las que iluminar
la sombra de este rostro
 
ya no me quedan gemidos
con los que articular
estas palabras mudas


ya no me quedan pesadillas
con las que atormentar
a este sueño desvelado

ya no me queda fango
para seguir dando forma
a esta realidad deforme

ya se extinguieron todas abejas
que producían la miel
para endulzar tus labios

ya se durmió el alba
que me despertaba,
ya se ha dormido la noche
en un sueño eterno

y mi ser
tras las rejas de estas costillas,
sólo ansía ya volver
a la luz de mi hogar en la lejania...